Cuando el día 13 de septiembre se cumplirán los seis meses del
pontificado del Papa Francisco podemos decir que se mantiene tanto la ilusión como
los temores respecto a su intento declarado de renovar la Iglesia.
También yo mantengo las ilusiones y los temores que expresé en mi último
escrito en NIHIL OBSTAT de antes del verano. Dije allí que su empeño es casi
imposible: “Porque no puedo olvidarme del
absolutismo que desde hace siglos ha echado sus raíces en ella. Y por tanto
posee una reciedumbre imposible de calcular. Basta tener en cuenta el tesón con
el que la Iglesia
fue amortizando la memoria de San Francisco y de sus primeros discípulos.
Sin embargo es igualmente cierto que hay otra cara de la Iglesia que también
pervive y resiste encarnada entre los pobres. Yo tengo fe que contra ella sí
que se estrellarán todos los poderes.”[i]
Pues bien, creo que no acerté en mi diagnóstico. Me quedé corto en la
apreciación de los enemigos que tendrá el Papa en su empeño.
Lo haré brevemente apoyándome en dos ejemplos muy reveladores.
1º.- En su reciente visita a Brasil él mismo lo ha demostrado durante la
famosa conversación en el avión de regreso a Roma. Me refiero a su respuesta
sobre la función menor y desventajosa de la mujer en la Iglesia. Cito de memoria su
tajante respuesta: “SOBRE ESE TEMA YA SE HA PRONUNCIADO LA IGLESIA.” En ella veo
inequívoco su sometimiento ineludible al gran e inamovible muro de lo que
podríamos denominar la DOGMÁTICA. Es
decir, la infalibilidad de su autoridad lo constriñe inevitablemente en grandes
campos del pensamiento y más en concreto en el de la moral natural. Constituye
un muro más inquebrantable que el poder y las estructuras de la curia vaticana
“poblada de cuervos.”
2º.- Me refiero a la frase literal de Pietro Parolin sustituto del
todopoderoso cardenal Bertone como nuevo Secretario de Estado Vaticano: Quien
ha declarado literalmente que su nombramiento es “una sorpresa de Dios”.
Resulta un poco más complicado explicar este segundo punto.
Desde luego para mí no tiene ninguna gracia emplear la ironía para este
tema. Y si no es con humor, aún me parece más desacertado. No voy a repetir
aquí los ya numerosos artículos que he publicado en esta revista denunciando lo
fácil y peligroso que es usar el nombre de Dios en vano.
Es un peligro que no sólo debe evitar la Iglesia Católica
sino todas las religiones.
En este caso es muy delicado cuando se intenta con su nombramiento algo
tan grave como la depuración de adherencias escandalosas de nuestra Iglesia
Católica.
RAMÓN GASCÓ.
Pues ... SÍ,
ResponEliminaUna pura ILUSIÓN
y con toda certidumbre.
Están enrocados: Tu es Petrus y sobre esta piedra .....
Tienen mucho que perder y no van a cambiar.
Arsenio Rey
Comentario de josé luis torner:
ResponEliminaTantas decepciones vividas justifican no dejarse llevar por grandes esperanzas pero yo prefiero soñar un poco que ahogarme en el pesimismo...porque el centro del mensaje cristiano es que desde aplastante realidad de la muerte, surge la buena noticia de una hasta entonces impensable resurrección...y es que sólo hace falta soltar lastre acumulado y dejarse iluminar valiente y esperanzadamente por el nuevo Testamento para sacar el espíritu de Jesús de los sótanos vaticanos donde lo tienen amordazado.
El"tot o res" tan valenciano, no es para mi la actitud más adecuada, sino aportar nuestro hombro, aunque ya debilitado por los años, a cualquier cambio que fomente la esperanza colectiva .
josé luis torner
Comentario de Antonio Vicedo
ResponEliminaEl asunto está en que, bajando el listón del valenciano TOT O RES, desde la realidad trágica globalizada sobre la Humanidad inhumana y desde la coherencia con el testimonio y mensaje nítido del Jesús que se nos presenta en los Evangelios, nos situamos en lo de buscar la eficacia en llenar de vino nuevo los pellejos viejos, o gastar el paño nuevo, tiempo y esperanza en poner remiendos que nunca alcanzan al deshilachamiento del traje viejo.
Además, lo que Jesús pide a sus discípul*s no es que carguen ellos con el remedio de que no falte el VINO EN LAS BODAS, sino que LLENEMOS DE AGUA las tinajas vacías. Porque de lo que se trata es de intentar eficazmente SER y COMPORTARNOS como HUMANOS en la abundancia de bienes que pone la Naturaleza y nuestras capacidades a disposición de TOD*S.
Antonio Vicedo."
Comentario de Francisco Asensi
ResponEliminaNo hay que echar las campanas al vuelo, pero tampoco ponernos quisquillosos e hilar tan fino... ¿Acaso no hay una distancia considerable entre este papa y los dos anteriores? Yo ya me doy con un canto en los dientes. Una cosa es lo que quisiéramos y otra lo que hay. Sin renunciar al desiderátum (la Iglesia no la fundó Jesús, ni el sacerdocio, ni los sacramentos, etc.etc.) reconozcamos, al menos, que en esa institución humana (poder fáctico que está ahí por muchos años) ha entrado un poco de aire fresco. Eso es un hecho, como lo fue el paso de Juan XXIII... ¡Qué no daríamos por ver en los políticos que nos gobiernan (en España y en el mundo)ese estilo.
Te acompaño un breve florilegio de frases extraídas de la carta del Papa Francisco, con ocasión de la beatificación del Cura argentino José Gabriel Brochero (14 septiembre 2013), donde se ve claramente qué clase de funcionarios quiere para la Iglesia.
*Pastor con olor a oveja.
*Pobre entre los pobres.
*Bien cerca de Dios y de la gente.
*No se quedó en la sacristía a peinar ovejas.
*Hablaba de un modo que todos lo entendían porque le salía del corazón, de la fe y el amor que él tenía a Jesús.
*Sacerdote lleno de caridad y misericordia. ¡Muchísima misericordia!
*Un sacerdote callejero de la fe.
*Salir a las periferias geográficas y existenciales para llevar a todos el amor, la misericordia de Dios.
*Salir a la calle a buscar al hermano, a tocar la carne de Cristo en el que sufre y necesita el amor de Dios.
*Salir de la cueva del «yo-me-mi-conmigo-para mí» del egoísmo mezquino que todos tenemos.