PARA BIEN Y PARA MAL, DA LA CARA JOSÉ Mª GIL TAMAYO. (Ramón Gascó)

El recién estrenado Secretario portavoz de la CONFERENCIA EPISCOPAL ESPAÑOLA, para bien y para mal ha expresado con toda claridad la doctrina y voluntad de sus superiores jerárquicos.

      Para bien porque la figura de la foto, aparecida en la prensa, de su rostro elegante, de hombre pulido, apaciguado y feliz, incluso su boca con los finos labios, casi espirituales, manifiestan la satisfacción de una vida, libre tanto de las tentaciones carnales, como de las angustias y preocupaciones de las penurias de la vida moderna. 

  Para mal porque con esa imagen plácida refuerza la inquebrantable seguridad de la doctrina de sus jefes, acusadora implacable de las desviaciones del mundo, el demonio y sobre todo, LA CARNE. 

     La reciente aparición ante la opinión pública es un buen ejemplo de ello porque expresa con toda claridad la doctrina y voluntad de la CONFERENCIA EPISCOPAL. ESPAÑOLA respecto a estos tres problemas que ha planteado la O N-U. en la acusación que les ha hacho de encubrir a los delincuentes de pederastia.

    Sin despeinarse, serenamente, ha respondido atacando sin pudor en los tres frentes. Sin embargo son tres búmeran, porque emplea razonamientos que en realidad son armas fácilmente reversibles contra ellos.

1º.- Las ideologías.

Gil Tamayo cree que “se aprovecha ese informe para entrar en cuestiones claramente ideológicas, en las que la Iglesia ha tenido un punto de vista distinto al de sus autores, como en temas de salud reproductiva, en cuestiones que son innegociables para la doctrina cristiana”. Hay una supuesta “inquisición laica con unos dogmas establecidos al amparo de Naciones Unidas como universales para todo el mundo. Para el no creyente, ¿qué es sino ideología la teología dogmática de todas las iglesias? ¿Qué son si no ideologías las verdades que defiende como “innegociables”?

Y por si fuera poco ¿no es cuanto menos inoportuno recurrir a la Santa Inquisición? ¿No es como nombrar la soga en la casa del ahorcado? en el mismo Evangelio se encuentra el rebote a la acusación "no ven la viga en su ojo".

2º.- Pederastia y el aborto.

Es desacertado salvar la inocencia de los pederastas simplemente porque no tienen mala intención en sus actos, lo cual es tergiversar el daño, a veces irreparable que se causa a los inocentes. El infierno nos decían en los ejercicios espirituales está empedrado de buenas intenciones.

3.- Otra mención inoportuna:

“No vamos a recurrir a la Guardia Suiza, ni nos vamos a militarizar” Aparte la ridiculez de la ocurrencia de emplear la Guardia Suiza para defender de los ataques al Cardenal Presidente Rouco, es otro infeliz testimonio y otro posible búmeran. El "brazo secular” fue un eficaz y cruel ejecutor de sus anatemas condenatorias, que será imposible olvidar en la historia y algunos mal pensados piensan que si ahora no lo emplean es porque no lo tiene. Miedo me da pensar que lo tuvieran.

RAMÓN GASCÓ.